La ilusión por las vacaciones nos produce regocijo, nos predispone maravillosamente. Todo lo que hacemos, aún las tareas más engorrosas, nos resultan livianas y llevaderas cuando tenemos en la bandeja de salida las añoradas vacaciones.
El tiempo de descanso dura bien poco, en comparación con la sorprendente cantidad del mismo que dedicamos a su planificación, ya en lo práctico (lugar, pasajes, reservas), como en cargar el baúl de las expectativas. Metemos descanso, diversión, caminatas, siestas, romances, comidas, bailes, juegos, lecturas, notas, etcétera.
Y todavía no hablamos de la ropa que vamos a usar para todo eso que las vacaciones nos prometen. Todos esos equipos que maridan con los eventos que planeamos. Me refiero a remeras, musculosas, tops, blusas, camisas, shorts, minis, faldas, jean, pantalón largo, joggineta, chupín, vestido playero, vestido por si hay fiesta, vestido por si salgo con "él", sweaters, sacos, saquitos, blazer. La campera de cuero rockera que amamos, la básica de jean de toda la vida, etcétera, etcétera. Y no estoy contando pulseras, sombreros, pañuelos y demás accesorios. Ni bombachas, ni camisones.
Y todavía no hablamos de la ropa que vamos a usar para todo eso que las vacaciones nos prometen. Todos esos equipos que maridan con los eventos que planeamos. Me refiero a remeras, musculosas, tops, blusas, camisas, shorts, minis, faldas, jean, pantalón largo, joggineta, chupín, vestido playero, vestido por si hay fiesta, vestido por si salgo con "él", sweaters, sacos, saquitos, blazer. La campera de cuero rockera que amamos, la básica de jean de toda la vida, etcétera, etcétera. Y no estoy contando pulseras, sombreros, pañuelos y demás accesorios. Ni bombachas, ni camisones.
¿Podemos llevar todo esto? claramente no. Por eso, amiga mía, te voy a proponer algo, que si bien no es precisamente un gran descubrimiento, es una idea sencilla que te va a ayudar a guardar en la valija ni más ni menos que lo que vayas a usar. Requiere pensar un poquito, pero tomarte ese rato, te va a ayudar a armarla eficazmente. Y a rearmarla a la vuelta, momento poco feliz en el que la ropa, deslucida ya, cumplió con su cometido y no supone más ilusión que caer en el lavarropas.
Lo primordial a tener en cuenta es el clima del lugar donde vamos. Obvio.
Luego de eso, los eventos que a ciencia cierta sabemos que vamos a tener. Es decir, si sabés que el día número tal de tus vacaciones, tenés "la fiesta de los caracoles" en el "Hotel Sarasa" (por darte un ejemplo), y el dress code es llevar algo con motivo marino, mejor que ya los sepas y te prepares para eso.
Otro factor a tener en cuenta, es saber con quiénes vamos a compartir las vacaciones, o con qué personas nos vamos a encontrar en nuestro destino. Porque estas también pueden influenciar en el armado de nuestra maleta, por tirado de los pelos que suene esto, estas personas pueden proponer eventos que requieran atuendos específicos. Como ser, jugar al tennis, o pasar un día en un velero. Y está bueno vestir apropiadamente para cada ocasión. Puede pasar también que en tu destino esté el muchacho que te gusta. ¿Ves? es importantísimo planear la maleta con anticipación.
Teniendo en cuenta todo lo anterior, vas a hacer un pequeño despliegue de ropa, vas a tomar del ropero todo lo que inicialmente llevarías, y vas a tratar de armar equipos, proyectando los días y los eventos. Recomiendo que te vayas probando los distintos outfits, y una vez que les des el visto bueno, los tires en el piso, y con la ayuda de tu smartphone amigo, o de tu cámara de fotos, tomes una foto de referencia poniendo, incluso, hasta los aros y el esmalte de uñas con que combinarías todo. Dato útil: le podés agregar un cartel que diga, por ejemplo: "para ir a comer a Pirulito´s". La idea es que un ítem forme parte de más de un equipo, si no, no sirve.
Vamos a suponer que nos vamos a la playa. Entonces la cosa queda más o menos así:
Etcétera. Como verás, el proceso no reviste demasiada complejidad, y el dato de sacarle fotos a las prendas, no es precisamente la pólvora. Pero sirve para combinar convenientemente y sacarle a la ropa el mayor provecho, ganando así más tiempo al momento de vestir. Tiempo que podemos emplear en encremarnos íntegras (tan agradable después de tomar mucho sol), o en arreglarnos mejor el pelo ;).
Espero que te sirva.
Espero que te sirva.